Una de las marcas más conocidas del mercado español de los whiskys single malt es sin duda Glenfiddich, especialmente su single malt de 12 años. Un whisky es single malt cuando en su elaboración solamente interviene un solo tipo malta y procede en su totalidad de la misma destilería.
Glenfiddich produce sus whiskyes en la región escocesa de las Tierras Altas, en una zona situada al lado del rio Speyside, de donde obtiene un agua de una gran calidad para elaborar sus whiskyes.
El whisky de malta Glenfiddich 12 años es el pequeño de los hermanos de una gran familia de whiskys single malt en la cual destacan el 15 años y el 18 años en una primera fase y los exclusivos 21 años y 30 años.
La botella de Glenfiddich es estilizada y de color verde. Originalmente viene dentro de un tubo de cartón metalizado para protegerla mejor de del sol.
El color es dorado paja. En nariz, Glenfiddich 12 años es fresco y elegante, apareciendo notas de fruta blanca como la pera y notas de madera suaves. En boca, las notas dulces de nariz se vuelven más secas pero persisten las de fruta blanca junto con notas de madera e incluso minerales. El final es largo y persistente dejando suaves recuerdos. Excelente.
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